viernes, 28 de octubre de 2011

La tecnología y el cine para toda la familia



Recordamos un clásico ochentoso de Disney que, en su momento, fue un hito tecnológico.

Los avances de la ciencia casi siempre se ven proyectados en el cine de ciencia ficción. Muchas veces lo hacen de forma oscura y tenebrosa, como en Matrix o en Blade Runner, pero hay gente que no se toma tan en serio esto de un futuro lleno de oscuridad y máquinas que dominan al mundo, sino que utilizan una premisa completamente terrorífica (pensemos en lo que hizo Richard Matheson con El hombre menguante) y lo llevan al terreno de la comedia familiar. Esto es lo que pasó, allá por la década del '80, con Disney y Querida, encogí a los niños.

Wayne Szalinski (Rick Moranis) es un científico loco moderno. Pero no es de esos tipos tétricos que se rien fuerte y reviven muertos, sino uno sencillo, con familia, casa y todo el gran sueño americano. O no tan sueño, la verdad, porque el dinero no entra, sus inventos son un fracaso y la relación con su esposa, Diane (Marcia Strassman) va de mal en peor. Su última creación, un rayo que sería capaz de encoger cualquier cosa, lo único que hace es volar al demonio todo lo que apunta, por lo que se convierte en el hazmerreir de la comunidad científica.

Hasta que un día, mientras sus hijos jugaban con los hijos del vecino, una pelota de baseball golpea la máquina. Cuando van a recuperar la bola perdida, el rayo se dispara, pero el impacto algo hizo en el laser, ya que los jovenes no explotan, sino que literalmente se encogen. Y eligieron un pésimo dia para medir 5 centimetros, porque el viejo Wayne vuelve del trabajo hecho una furia, destruye todo su laboratorio y, para colmo, cuando lo limpia, los chicos van a la basura con lo demás.

Ahora, ellos quedaron en la otra punta de la casa, en el patio trasero. Tienen que atravesar todo el jardín en lo que podría ser una travesía digna de Frodo Bolsón, y deberán enfrentarse a abejas, barro movedizo, escorpiones y demás pequeños peligros de cualquier casa.

Querida, encogí a los niños es una película que produjo Disney en 1989. Su director es Joe Johnston (recientemente conocido por Capitán América) y se trata de su debut detrás de las cámaras. Otro detalle al menos gracioso es que uno de los guionistas de esta película fue Stuart Gordon, quien cuatro años antes había dirigido el clásico del terror Re-Animador. Un jugador de toda la cancha, como se dice vulgarmente.

Querida... tuvo varias secuelas y spin offs. En 1992 se presentó Querida, agrandé al bebé, en donde... bueno, se imaginan, y en 1994 se presentó en Disney World Epcot (una feria que no funcionó) Querida, encogí a la audiencia, una película en 3D en donde el público se sentía como pequeñas hormigas en una sociedad de gigantes humanos. Finalmente, en 1997 Disney presentó, directo a video, Querida, encogimos, en donde Moranis toma un poco de su propia medicina.

Si hoy sienten algo de nostalgia, ver esta película los transportará a tiempos en los que las cosas no les importaban tanto. Lo único que valía, lo único preocupante, eran esos pobres y diminutos chicos siendo atacados por una abeja gigante. Buenos tiempos, ¿eh?